CONECTAMOS LA ESCUELA con la NATURALEZA

Clorofila: Probablemente sea la biomolécula más importante de la vida. Es la responsable del color verde de las plantas y de la fotosíntesis, el proceso bioquímico que transforma la energía solar en energía química. Los orgánulos de las células vegetales que albergan en su interior la clorofila se llaman cloroplastos. Veremos al microscopio varios de ellos.

Las Xantófilas: Son pigmentos carotenoides, responsables de la coloración amarilla, anaranjada y parda de las hojas de muchos árboles en otoño. Al igual que la clorofila es un pigmento fotosintético.

Las antocianinas: Son los pigmentos responsables de la coloración rojiza o morada de las flores, los frutos y las hojas de muchos tipos de plantas.   

Cromatografía: Es la ténica química utilizada en varias disciplinas científicas para separar e identificar sustancias químicas. Nosotros la utilizaremos para diferenciar los pigmentos y obtener bonitos marcapáginas.

Las orchillas: Son líquenes del género Roccella que se utilizaron desde tiempos remotos para teñir tejidos finos de color púrpura (las túnicas romanas se teñían con orchillas). No se conservan las fórmulas magistrales con las que nuestros antepasados lograban teñir la seda y la lana con orchillas, pero haremos algún experimento de laboratorio para obtener el color púrpura de estos líquenes.

Tinta ferrogálica: Fue la tinta más utilizada en escritura durante la Edad Media (con ella se escribió el Quijote). Para su elaboración se necesitan agallas de roble, sulfato ferroso y goma arábiga.